Descubre una nueva relación con el dinero
Durante años, he visto cómo personas con buenas ideas y capacidades brillantes se quedan atascadas en el mismo lugar. No por falta de conocimiento técnico, sino porque algo más profundo las frena.
Este programa nació de esas conversaciones honestas. De entender que nuestra relación con el dinero se construye mucho antes de que tengamos nuestra primera cuenta bancaria.
Trabajaremos con creencias que heredaste sin darte cuenta. Con patrones que repites automáticamente. Y sí, esto puede sonar incómodo al principio.

Cómo funciona el programa
Reconocer patrones
Empezamos identificando esos mensajes que te quedaron grabados. Los que escuchaste en casa, en el colegio, en tu primer trabajo. Algunos te ayudan, otros te limitan más de lo que imaginas.
Explorar emociones
El dinero trae consigo miedo, vergüenza, orgullo. A veces todo a la vez. Aprenderás a observar estas reacciones sin juzgarlas, porque entenderlas es el primer paso para cambiarlas.
Construir nuevos hábitos
Aquí es donde la teoría se encuentra con tu realidad diaria. Pequeñas acciones que pueden sostenerse en el tiempo. Nada de cambios radicales que duran dos semanas.
Quiénes te acompañan en este proceso
Profesionales que han caminado este camino antes que tú y entienden las dificultades reales que encontrarás

Óscar Vilanova
Psicología económica
Lleva más de una década investigando por qué tomamos decisiones financieras que sabemos que no nos convienen. Su enfoque es práctico y directo, sin rodeos innecesarios.

Nuria Beltrán
Educación financiera
Después de trabajar en banca tradicional durante años, decidió que había una forma más humana de hablar sobre dinero. Ahora ayuda a personas a entender sus finanzas sin sentirse juzgadas.

Elsa Romero
Coaching financiero
Especializada en trabajar con emprendedores que tienen miedo de cobrar lo que valen. Conoce bien esa sensación de incomodidad al hablar de precios porque ella misma la vivió.
El próximo grupo comienza en septiembre de 2025
Son grupos pequeños porque este trabajo necesita espacio y atención. No puedes cambiar en dos días lo que llevas años construyendo.
Duración: 12 semanas con sesiones cada martes por la tarde